Aquí hay algo para considerar. Digamos que tu objetivo es ser vicepresidente de una gran empresa. Después de muchos años de intenso estrés, preocupación y sobrecarga emocional, mental y física, por fin logras tu objetivo: Riqueza y prestigio. ¿Es este el éxito?
Si consultas un diccionario, la respuesta es sí. El Diccionario Webster define el éxito: La terminación favorable o próspera de intentos o esfuerzos. La obtención de riqueza, posición, honores o similares.
Es triste leer que la palabra “feliz”, “felicidad” o “alegría” no estén incluidas en la definición de la palabra “éxito”. Que nuestra definición de ello sea ser ricos o tener prestigio.
Muchos piensan que para ser felices necesitan alcanzar un resultado tangible. Lo relacionan con un auto, casa, dinero, pero no se trata de eso. Cuando tu percepción de éxito se basa en lo monetario y te pones una meta de “voy a ser exitoso cuando logre ganar 1,000,000.00. Al llegar al millón te vas a sentir satisfecho tres minutos y vas a decir tengo que generar 5,000,000.00 y cuando llegas a los 5,000,000.00 tu emoción durara otros 3 minutos. “Quiero tener 10,000,000.00… Esto se vuelve un juego eterno de conseguir dinero para “alcanzar la felicidad”. No se hace suficiente hincapié en el valor de disfrutar el viaje, desarrollar el carácter y aprender las lecciones de vida en el camino.
¿Cuánta gente conoces con una economía buena pero infelices? ¿Personas que sobreponen su trabajo y no pueden pasar tiempo con la familia?, ¿a personas que sacrifican pasiones, ponen en riesgo su salud, para alcanzar algo tangible? El éxito repito, no es un resultado tangible. Es un estado que debes definir, y si conlleva algo económico está bien, siempre y cuando no descuides otros aspectos importantes. Así como he conocido gente rica, pero infeliz, también he conocido gente con pocos recursos pero muy felices.
| Un hombre de éxito no se mide por lo que tiene, sino por lo que es. Séneca |
Disfruta el viaje…
Nos olvidamos lo que en verdad importa: el viaje, el descubrir que nos hace felices, hacer esto ayuda a llevar una vida más satisfactoria.
En otras palabras. No eres más feliz cuando persigues la felicidad, eres más feliz cuando no piensas en ello. Cuando disfrutas el momento presente porque estás entregados a un proyecto que tiene sentido para ti, tienes relaciones sanas y positivas, y cuando ayudas a alguien que te necesita y sobre todo… disfrutas el viaje.
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¡Si no eres feliz no tienes éxito!
Realmente quiero que entiendas esto. Si el proceso de cumplir tus objetivos está contaminado con energía negativa, dejas de hacer cosas que te apasionan y alejas a las personas que quieres, solo vas a crear infelicidad. Incluso si el resultado es positivo a corto plazo. La felicidad que sientas al alcanzar el “éxito” va a ser un estado temporal dictado por tu definición convencional. Después de que la euforia inicial desaparezca, estarás de vuelta en el mismo lugar negativo, porque has llevado esa misma mentalidad negativa contigo.
La verdad es que realmente no importa cuánto dinero tengas, ni cuán famoso seas, ni cuántos objetivos hayas alcanzado. No importa cuán grande sea tu casa o qué elogios de la industria has acumulado en tu carrera. El mundo entero puede ver tu vida como la mejor historia de éxito, pero la conclusión es esta: ¡si no eres feliz no tienes éxito! Si no te estás divirtiendo en el viaje hacia tu meta, te estás estafando. Créeme hay suficientes personas dispuestas a hacer eso por ti.
| «Pienso que todo el mundo debería ser rico, famoso y hacer todo aquello que siempre soñaron. Así podrían darse cuenta de que esta no es la respuesta» Jim Carrey |
La aventura hacia cualquier objetivo es lo que aporta valor.
La aventura hacia cualquier objetivo es lo que aporta valor. El camino hacia la meta es donde se desarrolla tu vida, es ahí donde la felicidad es real y significativa. Cuando estás en el proceso de trabajar para lograr algo, experimentas quién eres y de qué estás hecho.
Cuando te das cuenta de la importancia de cada paso del proceso te envías un mensaje a ti mismo y al universo ¡que no estás solo! Si no que estás listo para superar los obstáculos en el camino. No hay absolutamente ninguna razón por la que no puedas hacer una elección consciente para experimentar y disfrutar el viaje hacia la meta. Si lo haces, sin duda tendrás una profunda apreciación de cómo te lo ganaste. En mi opinión, ese es el éxito final.
Te recomiendo ver este vídeo a partir del minuto 30, (1.30) sobre la brutal honestidad de este chico.
Cómo pueden ver en el discurso, este chico dedico todos sus años de preparatoria enfocado a cumplir la meta de ser el mejor estudiante de su escuela solo para darse cuenta de que no valió la pena. Porque si bien, había logrado algo importante no logro disfrutar su tiempo y crear las relaciones que necesitaba en su vida… así que repítete esta frase “Si no eres feliz no tienes éxito”. 😉
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